Tejiendo comunidad: El valor de lo local en Casa Carolina
July 27, 2025
En Casa Carolina creemos que viajar puede ser un acto transformador. No solo para quien lo vive, sino también para el territorio que lo hace posible. Por eso, más allá de ofrecer una estadía encantadora en el corazón de Cartagena, trabajamos día a día para construir relaciones reales, sostenibles y respetuosas con las comunidades que nos rodean.
Nuestro compromiso va más allá de lo estético o experiencial. Nos mueve una filosofía de hospitalidad consciente, donde cada decisión, cada alianza y cada gesto busca sumar valor a lo local, proteger el patrimonio cultural y fortalecer los lazos sociales del entorno. En ese camino, encontramos dos grandes aliados que nos inspiran y nos retan a ser mejores: Asocoman y la Fundación Granitos de Paz.
Asocoman: Mujeres que sostienen el alma del Caribe
Asocoman (Asociación de Mujeres del Carmen de Bolívar) es una organización que nació del dolor y la esperanza. Integrada por mujeres desplazadas por el conflicto armado, se ha convertido en un ejemplo vivo de resiliencia, trabajo colectivo y dignificación a través del arte culinario. Su sede, ubicada en el tradicional barrio de Santa Rita en Cartagena, es un lugar donde la cocina se transforma en un vehículo para contar historias, preservar saberes ancestrales y generar autonomía económica.
En Casa Carolina creemos firmemente en la fuerza de estas mujeres y su capacidad para inspirar. Por eso, trabajamos con ellas para promover sus productos, abrir espacios de formación mutua y construir puentes entre nuestros huéspedes y las cocineras tradicionales que hoy representan con orgullo una de las raíces más auténticas de la gastronomía caribeña.
A través de talleres, encuentros y degustaciones organizadas en conjunto, nuestros visitantes pueden no solo saborear platos únicos, sino también comprender el profundo tejido social que existe detrás de cada receta. Lo que para muchos puede parecer un simple “plato típico”, para estas mujeres es un acto de memoria, una forma de resistencia y un camino hacia la autosostenibilidad.
Fundación Granitos de Paz: Transformar territorios con dignidad
Por otro lado, la Fundación Granitos de Paz nos recuerda que el cambio verdadero comienza en casa, en el barrio, en la vida cotidiana. Desde 2005, esta organización sin ánimo de lucro ha impactado positivamente a miles de familias en sectores tradicionalmente marginados de Cartagena, especialmente en el barrio El Pozón.
Su enfoque integral que abarca educación, salud, emprendimiento, vivienda y cultura ha permitido que comunidades enteras transformen sus condiciones de vida de manera sostenible y digna. A través de programas de desarrollo comunitario, huertas urbanas, brigadas médicas y talleres para jóvenes, la fundación promueve una visión de futuro basada en el empoderamiento y la participación activa de los habitantes.
En Casa Carolina nos sentimos profundamente identificados con esa visión. Por eso, hemos empezado a colaborar activamente con la fundación, apoyando iniciativas educativas y abriendo espacios de visibilización para sus proyectos. Entendemos que ser un actor responsable del turismo implica asumir un rol activo en la construcción de una Cartagena más justa, equitativa y conectada con su gente.
Viajar con propósito
Viajar no tiene por qué ser una experiencia superficial. Cada decisión de consumo, cada lugar que elegimos visitar y cada historia que decidimos escuchar puede marcar una diferencia. En Casa Carolina, invitamos a nuestros huéspedes a ir más allá del turismo tradicional y a descubrir una Cartagena viva, auténtica y profundamente humana.
Ya sea a través de una cena elaborada con ingredientes de productores locales, un tour gastronómico guiado por mujeres de Asocoman, una visita a un proyecto comunitario de la Fundación Granitos de Paz, o simplemente una conversación con alguien del barrio, buscamos que cada persona que pase por nuestra casa se lleve mucho más que una foto bonita: que se lleve una conexión real con el territorio.
Nuestra apuesta: turismo regenerativo
El turismo del futuro y del presente es regenerativo. Es decir, no solo busca minimizar su impacto negativo, sino dejar el lugar mejor de lo que lo encontró. En Casa Carolina apostamos por esa visión: una en la que la belleza no sea solo visual, sino también ética y social.
Seguiremos tejiendo redes, construyendo alianzas y aprendiendo de quienes ya llevan años transformando Cartagena desde sus propios territorios. Porque creemos, profundamente, que lo local no es solo un detalle; es el corazón de todo.